He de confesar que, a pesar de haber disfrutado de la serie, esperaba mucho más de ella. Os cuento primero su trama, y después os doy mi opinión.
La cocinera de Castamar, basada en una novela de Fernando J. Muñez, cuenta la historia de Clara Belmonte (Michelle Jenner), una joven bastante desgraciada y con una fobia complicada, que llega a las cocinas del palacio del Duque de Castamar, Don Diego (Roberto Enríquez). Poco a poco, la señorita Belmonte, se hace con el poder de los fogones y trastoca para siempre la vida y los sentimientos del señor de la casa que, angustiado por su pasado, sigue encerrado en sí mismo y obsesionado por la muerte de su mujer.
La cocinera de Castamar está basada en una novela de Fernando J. Muñez.
A esa trama se suman otras: la de Sol Montijos (Marina Gatell) y Don Francisco Marlango (Maxi Iglesias). No había visto actuar a Gatell desde la serie LaLola, en la que era la protagonista y, he de decir, que me sorprendió escena tras escena. Personaje oscuro, resabiado, triste y con ganas de volar pero con un gran secreto que acaba pagando.
Por otra parte esta Iglesias, que da vida a esa desgraciada de Sol Montijos. Intenta salvarla de todo lo que la agobia, pero, sin éxito. Maxi Iglesias nunca falla, ya sabéis que es otro de mis tops.
También y sin duda, para mí, la pareja estrella de esta serie son Amelia Castro (María Hervás) y el marqués de Soto (Hugo Silva). El papel que hacen estos dos últimos es lo mejor de esta serie. Hervás está fabulosa en su papel de niña manipulada, solitaria y a la que todo el mundo toma el pelo. No es nada fácil interpretar tanto con tan poco guion y con tanta expresión. ¿Quién es quién la manipula y se aprovecha de ella? Un Hugo Silva al que le sienta fenomenal hacer de malvado. Cínico, embaucador, malévolo, lo tiene todo. Una auténtica maravilla verlos actuar juntos.
Michelle Jenner y Roberto Enriquez son dos maestros de la interpretación que, a lo La Bella y la Bestia intentan construir juntos una vida con mucha dificultad. El señor y la cocinera, amor imposible e impensable y más si, el marqués de Soto y Amelia Castro les pisan los talones e impiden su historia; uno por intereses que tenéis que descubrir y ella, sin darse cuenta.
Otros personajes que han marcado la trama han sido los siguientes: Gabriel (Jean Cruz), el esclavo negro que, convertido en hermano del Duque, aporta frescura y sinceridad a una serie llena de tristeza y rencor, Doña Mercedes (Fiorella Faltoryano), la madre de los señores de Castamar, siempre fiel y queriendo lo mejor para sus hijos y su legado. Doña Úrsula (Mónica López) y Melquiades, un ama de llaves con mucha rectitud y un mayordomo con gran seriedad y respeto por cada miembro que ocupa el palacio y, por supuesto, Elisa (Paula Usero) y Roberto (Michel Tejerina), que recuerdan a dos personajes que también aparecen en la película de Disney que os he nombrado antes.
Así que resumiendo, ¿qué ha sido para mí lo más positivo y negativo de La cocinera de Castamar? Mi respuesta:
-Lo peor de la serie: tanto sexo injustificado y un final que no acaba de desarrollarse, que termina en menos de un minuto y que te deja desganado.
-Lo mejor: el pedazo de elenco en el que nadie falla y está a la altura de grandes actuaciones. El vestuario, los escenarios y la delicadeza y fuerza de todos y cada uno de ellos.
Como me suele ocurrir, me gustó más el libro que su adaptación a la televisión, pero, a pesar de todo, es una gran producción.
Lo mejor de la serie es su pedazo de elenco, a la altura de grandes actuaciones.